domingo, noviembre 02, 2008

Sabado Gigante

Ayer me dispuse a dormir temprano, desde las 7 de la tarde, pero el hambre me despertó a las 10 mas o menos, así que me dispuse a ir a buscar algo de comer, había pensado en ir al supermercado a comprar un par de t-bones un poco de ensalada y papas, una cena especial para mi día de alejamiento de todo, y solo dedicado para mi...
El teléfono suena, una incitación a cenar por parte de una vieja amiga, mmm, no, me conozco y mejor no hago cosas malas que parezcan buenas, ella preparará algo en su casa, eso es firmar un encuentro, así que declino la jugosa oferta, después de media hora de charla quedamos en que mejor después por que me duele la cabeza.

Ahora si voy por los tibones, pero primero debo cambiarme de ropa, el super de un soltero debe tener algo de clase, así que consigo ropa casual y m remojo los pelos de la cabeza. Ahora si...

El teléfono suena de nuevo, shit! Otra amiga, que me invita a salir, declino esta vez con mas facilidad, esta ni siquiera es bonita así que me decido rápido pero cortésmente...

Ahora si me voy y cuando estoy por subir al carro, suena de nuevo el teléfono, mis viejos amigos de la prepaaaa! DIOS! YO LOS HABÍA ENTERRADO DE POR VIDA, debido a que son, mmm, cómo dijéramos para no ser grocero... MMM a, sii, ESTÚPIDOS! Estos tipos siguen pensando como prepis, digo que no y pongo de excusa que no tengo dinero, ellos insisten un rato, yo finjo que la llamada se corta y les cuelgo. Insistieron 3 veces mas pero no contesté.

Son las once de la noche y aun no ceno, es muy tarde ya para ir a comprar y hacer la cena, que mierda. Compré flautas en un puestecito de mi vecindario y me los comí mientras miraba Sábado Gigante. Don Francisco me arrancó una sonrisa, me dio miedo y mejor me dormí.

No hay comentarios.: